Dos genes en particular de una familia de genes reguladores son vitales para el control de la proliferación celular durante el desarrollo de la placenta, según un nuevo estudio realizado por investigadores de la Ohio State University Comprehensive Cancer Center.
Cuando las células de la placenta madre fueron retiradas también faltava retirar un tercer gen, el gen de la activación de llamada E2f3a, los defectos placentarios fueron corregidos y los embriones nascieran.
«Los resultados proporcionan información acerca del papel de estos dos genes represores», dice el director de los investigadores Gustavo Leone, profesor asociado de medicina y director asociado de Investigación Básica.
Los dos genes pertenecen a una familia de genes reguladores que, en los seres humanos, tiene ocho miembros. Se cree que todas son necesarias para activar o suprimir otros genes para controlar la división celular y la proliferación tanto en células normales y cancerosas. Pero lo que los genes regulan y cómo interactúan unos con otros en animales vivos es poco conocido.
«Los genes reguladores E2F han sido considerados como importantes por mucho tiempo, pero con muchos de ellos, ha sido difícil decir que uno está haciendo qué,» dice Leone.
«Aquí, mostramos que los represores E2F7 y E2f8 son esenciales para el desarrollo de una placenta funcional intacta y para compensar los efectos de la activación de genes E2f3a», dice Leona. «Debido a que estos 2 represores son importantes para la proliferación, también pueden jugar un papel importante en el desarrollo de un tumor».
Para este estudio, Leone y sus colegas utilizaron modelos animales que carecen de uno o más de los tres genes E2F en las células madre del trofoblasto, que dan lugar a la placenta.
A principios de trabajo dirigido por Leona ha demostrado que en algunos casos, un gen E2F puede ser un activador en algunos tejidos y un represor en otros.